temc.

Y pensar que nunca te he visto reír de verdad.
Me enferma esta constante necesidad de soltar la estupidez del día para esperar tu reacción con impaciencia. Me desquicio ante tus ojos sin que importe demasiado que pienses, que estoy cansada o enfadada, porque el silencio seguirá siendo el mismo.
Y es que todo empieza a parecerme completamente absurdo.
10.Febrero.2011

No hay comentarios:

Publicar un comentario